Voces en la ribera del mundo
- Título: Voces en la ribera del mundo
- Autora: Diana P. Morales
- Editorial: Triskel
- Formato: papel, ebook
- Nº de páginas:
- Diseño de cubierta: Triskel Ediciones
- Fecha de publicación: mayo 2019
- Fecha de lectura: octubre 2019
- Enlace de compra: Lektu
Elegí esta novela para mi #LeoAutorasOct porque había leído buenas críticas y comentarios muy positivos en las redes sociales. No había leído antes nada de la autora, por lo que no sabía lo que iba a encontrar. Ha sido toda una sorpresa, y de lo más agradable.
Por circunstancias personales que no vienen al caso, hace unos meses que leo bastante menos de lo que me gustaría. Y, lo que es peor, no disfruto de la lectura como acostumbraba a hacerlo. No sé por qué, pero me cuesta entrar en los libros y engancharme a las historias. El resultado es que los ratos de lectura se van espaciando cada vez más y siendo cada vez más cortos.
Hasta que empecé Voces en la ribera del mundo. Este libro ha conseguido que me enganche desde la página uno y me ha mantenido en ese estado hasta el final. Me lo he leído en dos sentadas, como era mi costumbre antes de esta crisis lectora, así que estoy muy agradecida a su autora por despertar de nuevo mi pasión por la lectura.
Reencuentro con la pasión por la lectura
¿Qué tiene de especial Voces en la ribera del mundo para haberme sacado de mi apatía? Si lo analizamos fríamente, la verdad es que no tiene una trama muy novedosa. El argumento central de la novela es un tema que casi podríamos calificar de trillado: la humanidad destruyéndose a sí misma, por un lado, y buscando desesperadamente la forma de salvarse, por otro.
Los distintos elementos que aparecen en la historia también los hemos visto en inmumerables novelas y relatos de ciencia ficción: naves que exploran el espacio en busca de mundos habitables, Inteligencias Artificiales, especies extraterrestres no antropomorfas, catástrofes de diversa índole que amenazan la supervivencia de la especie humana… Realmente, no hay nada que resulte especialmente innovador.
La estructura, por otra parte, tampoco resulta novedosa. De hecho, en los últimos meses he leído varios libros que utilizan un recurso parecido: capítulos que pueden leerse como relatos autoconclusivos pero que tomados en conjunto construyen una única historia, como las piezas de un Lego. Algunos ejemplos de los que también os he hablado aquí son Los tejedores de cabellos, de Andreas Eschbasch (Alamut, 2019) o Asunto NM, de Conchi Regueiro (Saco de Huesos, 2019).
Y, sin embargo, Voces en la ribera del mundo tiene algo especial. Puede que sea la variedad de tonos y estilos literarios que contiene. Cada capítulo resulta diferente al anterior, no solo porque cambien el o la protagonista, el contexto temporal o el lugar, sino porque realmente son relatos con diferente cariz y temperamento literario.
Diana P. Morales. Imagen extraída de El Portal del Escritor
Algunos de mis favoritos tienen un tinte deliciosamente humorístico. El arranque del libro no podía haber sido mejor. El protagonista de Mi existencia no ha sido en vano, Hidalgo –veo mucha sorna en la elección de este apellido– me ha recordado a algunos de los personajes más inmorales de Scalzi, aunque un tanto «españolizado». Y el giro final que toma también me recordó un cuento de Elia Barceló, La Dama Dragón, que aparece en Sagrada (Sportula, 2018). ¿Cómo no me iba a enganchar con ese primer capítulo?
Pero es que el resto de capítulos-relato tampoco tienen desperdicio. Hilarante resulta también la disparatada paradoja temporal planteada por el viaje de Ludger; pero Intentos de comunicación, narrado en primera persona por una niña autista, o Las leyes de la física, narrado por una superviviente, son capaces de conmover hasta el tuétano al más impasible de los lectores. Hay hasta un capítulo que encajaría perfectamente en una antología de relatos de género Z.
Paradoja temporal
No faltan la innovación formal en algunos capítulos –como Qualia y la canción irrepetible, narrado desde el punto de vista de una I.A. multiproceso– o el retorno a una literatura de sabor más clásico, como en Fábula del muchacho que huía todo el tiempo –por cierto, aconsejo leer este capítulo liberando la mente de todo prejuicio o idea preconcebida. Yo constaté mis propios prejuicios demasiado tarde–.
Pero Voces en la ribera del mundo no es solo un alarde de la versatilidad de su autora o un muestrario de la variedad de estilos literarios que domina. Eso podría haberlo hecho con una simple colección de relatos. Y lo que tenemos entre manos es una auténtica novela, una historia que abarca varios siglos, construida a base de piezas sueltas y desordenadas que, poco a poco, van encajando.
Creo que precisamente ese desorden temporal constituye otro de los encantos del libro. Voces en la ribera del mundo empieza prácticamente por el final. Desde el primer capítulo sabemos que la Tierra se ha convertido en un desierto desolado. El fin del mundo ha tenido lugar. Lo que no sabemos es cómo ha ocurrido. A lo largo del libro aparecen diversas amenazas inminentes, todas ellas con capacidad de provocar un apocalipsis –ninguna desconocida para el lector de ciencia ficción–. Y no lo descubriremos prácticamente hasta el final. Suspense y tensión garantizados.
Otra de las características que han hecho que esta novela me resulte tan atractiva es la gran diversidad de personajes que incorpora. Hay diversidad en todos los sentidos de la palabra: diversidad sexual, funcional, étnica, lingüística… Creo que el hecho de incluir tantas miradas diferentes enfatiza de alguna forma el mensaje que transmite la autora con su novela: el planeta Tierra es nuestro hogar, de toda la humanidad. Su conservación es, por lo tanto, un problema que nos concierne a todos por igual, sin distinción de sexo, raza, edad…
Porque sí, Voces en la ribera del mundo contiene un mensaje de advertencia, una denuncia de todos los atropellos que la humanidad comete a diario contra el planeta y contra sí misma, que a la larga pueden llevarnos a todos al desastre. Pero también trae un rayo de esperanza. Diana P. Morales, en estos catorce capítulos, nos muestra una humanidad capaz de cometer los peores crímenes pero también de hacer los mayores sacrificios. El ser humano al desnudo, con sus grandezas y sus bajezas.
Valoración
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Valoración - 9.5/109.5/10
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