DATOS DEL LIBRO
- Autor: RAY BRADBURY
- Año: 1953
- Edición: DEBOLSILLO, 2015
- Nº de páginas: 192 páginas
- Encuadernación: Tapa blanda
- Encuadernación:ANGEL CRESPO PEREZ DE MADRID
- Lengua: CASTELLANO
- ISBN: 9788490321478
- Fecha de lectura: Octubre de 2016
Con esta entrada, empieza una serie de reseñas sobre lo que podríamos considerar como la Trilogía de Distopías más importantes de todos los tiempos:
- Fahrenheit 451 de Ray Bradbury.
- Un mundo feliz de Aldous Huxley.
- 1984 de George Orwell.
Antes de plantearme leerlas, quería tener un pequeño recorrido en lectura de novelas de Ciencia Ficción, así que después de engullir 15 novelas en 2 meses, con varios premios Hugo, Nébula y Locus, creo que tengo la perspectiva necesaria para afrontar su lectura con ciertas garantías (eso pensaba en el momento del primer borrador de esta reseña, qué equivocado estaba…).
Así que esta semana (nos remontamos a octubre de 2016) he leído las 3 novelas, una detrás de otra. Pronto publicaré una entrada con reflexiones sobre las 3 obras, comentaré sus diferencias y lo que yo creo que son sus puntos fuertes y sus errores, si es que los tienen.
Antes de comenzar con la reseña, sí que me gustaría comentar que son 3 novelas que recomendaría a todo el mundo, incluso a la gente que odia el género. Para mí, son 3 lecturas imprescindibles si quieres entender la literatura, el cine y la televisión de este siglo.
Fahrenheit 451
En mayor o menor medida, todos los aficionados a la lectura, incluso los que no lo éramos tanto, hemos oído hablar de alguno de estos 3 textos. En mi caso, había oído comentarios sobre los 3. Por ello, tenía la idea de leer en un orden concreto las novelas, de la que yo creía que me iba a gustar menos a la que yo creía que me iba a gustar más.
Pero la lectura del comentario de Dan Chaon sobre Bradbury en su relato corto «Pequeña América«, hizo que sintiera un deseo irrefrenable de leer a ese genio del que hablaba Chaon.
Lo que he encontrado en esta novela, ha sido muy importante para mi desarrollo como lector, ha roto mis esquemas, ha cambiado mi punto de vista. Por eso, voy a afrontar la reseña desde mi propia experiencia, intentando no dejarme influir por lo que los demás opinan del libro, que siendo como es un clásico, os aseguro que es mucho y desde diferentes posturas.
En este caso, sí que me parece importante separar en 2 apartados «lo que dice la novela» y «cómo lo dice el autor», sobre todo pensando en las diferencias con las otras 2 obras que he leído esta semana. De hecho, el segundo apartado es lo que más me ha gustado de esta novela, la manera que tiene Bradbury de contarnos la historia, de introducir los personajes y de narrar sus experiencias.
Supongo que la mayoría conoceréis o por lo menos habréis oído hablar del argumento de la historia que nos cuenta Bradbury, un mundo en el que los libros están prohibidos y se castiga cruelmente a cualquiera que tenga el valor de poseer uno. Un argumento sencillo, de hecho, la lectura del libro es muy ágil y la frescura del maravilloso estilo narrativo del autor hace que en ningún momento tengamos la sensación de encontrarnos perdidos.
Esa es la gran virtud que he encontrado en esta novela. Un texto sencillo, que no llega a profundizar demasiado en la sociedad que describe, que no entra en detalles superfluos, que no explica casi el cómo ni el porqué, pero que nos sumerge de lleno en una de las atmósferas más negras, crueles y crudas que he tenido la suerte de poder añadir al Palacio de mi memoria (esto va por vosotros, Marcheto y Odo).
Las imágenes de los personajes se han creado con una claridad absoluta en mi mente, la capacidad de hacerte empatizar con ellos que tiene el autor es superior a cualquier novela que presente a los personajes con todo tipo de detalles. Desde las primeras palabras que dedica a sus protagonistas, empieza la magia.
Lo que me sugieren los personajes
Montag, protagonista de la novela, personaje oscuro y simple en principio, pero que según avanza la trama va profundizando en su propio ser. Sus sensaciones, las múltiples disonancias cognitivas que se le plantean, sufrimiento, miedo, incertidumbre. Es un personaje que empiezas odiando, llegas a comprender y terminas sufriendo por él.
El personaje de Clarisse es el que más me ha gustado de esta novela. Realmente poco llegamos a saber de la joven que desencadena el cambio de Montag. Pero tengo su imagen grabada a fuego (buena metáfora para esta novela). Su simpleza, su manera de ver las cosas en un mundo en el que debería de verlas de otra manera, las incógnitas que nos deja… maravilloso.
Beatty, ese personaje que cuando terminamos la novela no sabemos si odiamos o comprendemos, si estaba en lo cierto o si se equivocaba, si deseaba lo que ocurrió o si por el contrario intentaba evitarlo. Es el personaje que consigue que el protagonista se plantee que tal vez está equivocado, pero a su vez, creo que es el que finalmente empuja a Montag.
Mildred, la mujer de Montag, por decirlo de alguna manera. Este personaje es otro de los que me ha marcado profundamente, ya que aunque en principio no llegas a empatizar con ella, vas descubriendo que su vida es el resumen perfecto de lo que Bradbury quiere decir con esta novela. El resumen de la felicidad de una vida sin inquietudes, sin cuestionarse nada, enfocada exclusivamente a seguir el sistema, engullida por la sociedad. Empiezas odiando al personaje, pero llegas a comprenderlo y a sentir lástima, incluso afecto.
Faber, antiguo maestro de literatura, ejemplo de lo que ya no existe y a su vez ejemplo de lo que en ese momento es la sociedad. O estás con el sistema, o acabas recluido con miedo recordando tiempos mejores. Solo recordando, sin hacer nada para remediarlo.
Y por supuesto, aunque no quiero adelantar nada, nuestro querido amigo, El sabueso robótico.
La novela en su conjunto
Lo que por un lado es una de las mayores virtudes de la novela, la sencillez de su trama, por otro lado puede ser también uno de sus puntos flacos. Al final de la lectura te da la sensación de que podía haber entrado más profundamente en algunos momentos, sobre todo al final. Un final que no termina de dejarme completamente saciado y que además, no termina de hacer volar a mi mente como otras novelas o relatos que dejan temas en el aire.
Así y todo, es una de las mejores novelas que he leído y Bradbury es sin duda uno de los mejores autores. Su estilo, su manera de hacer que un texto lleno de matices resulte sencillo de leer, como consigue envolverte en su mundo y vivir la historia con sus personajes. Un genio escribiendo una obra genial.
No he querido entrar en interpretaciones, en lo fantástico de sus posibles visiones premonitorias ni en la relación que puede guardar con la sociedad actual. Cada uno que saque sus propias conclusiones. Lo que si os aconsejo es leer la novela desde el desconocimiento de las opiniones de otros, desde la objetividad, desde el sentimiento propio. Y luego, si os apetece, podéis leer lo que otros opinan de la novela, no sin antes reservar varias horas… Parece que todo el mundo ha hablado de esta novela en algún momento.
Sistema de Valoraciones Origen
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9.5/10
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9.7/10
Desarrollo desde Origen
31-10-2016: Sin duda una de las mejores novelas que he leído, llena de profundidad, oscuridad y crudeza. El estilo narrativo de Bradbury, genial.
Origen
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¡Buenas!
Un análisis genial, a mí también es uno de los libros que me más me han gustado, y ahora tengo ganas de releérmelo. Muy interesante el análisis de los personajes, hay algunos en los que no había pensado de esa manera.
Estoy deseando leerme las otras dos.
Un saludo 😀
Muchísimas gracias!
Me encantó el libro. Pero verás cuando llegue 1984 de Orwell… Me parece la mejor reseña que he escrito, no tanto por mí como por las ilustraciones que me han cedido. Preciosas y hechas a mano.
Un saludo.
¡Buenos días!
Una muy buena reseña.
Es el único de los tres que nombras que me falta por leer. En su momento leí 1984 y Un Mundo Feliz de manera casi consecutiva, y supongo que me agobio tanta distopía.
Por lo que comentas, cometí el grave error de dejarme Farenheit 451, pensando que quizá era otra visión de un mundo destrozado en el que hemos dejado de ser lo que somos porque lo exige nuestra seguridad como especie (aunque las visiones de Huxley y Orwell son brillantes y aterradoras a partes iguales), y pensé que tenía suficiente.
Tendré que rebuscar entre los antiguos libros de mi padre y rescatar a Bradbury del polvo.
¡Estoy deseando leer esa reseña de 1984!
¡Muchas gracias por tu comentario!
Solo por el placer de leer lo que es capaz de hacer Bradbury con pocas páginas, merece la pena leer este libro. Te metes hasta dentro. No te defraudará.
Conocí a Ray Bradbury personalmente, a primeros de los años ochenta , en un restaurante de Hollywood, al que nos había invitado mi amigo periodista argentino, ya desaparecido, Raul Riutor.