Datos del libro:
- Título: Consecuencias naturales
- Autora: Elia Barceló
- Editorial: Crononauta
- Formato: rústica con solapas
- Nº de páginas: 275
- Ilustración de portada: Mercedes Palacios
- Fecha de publicación: febrero 2019
- Fecha de lectura: febrero 2019
- Enlace de compra: web de la editorial
Todos los aficionados a la literatura de ciencia ficción estamos de aniversario. Celebramos las bodas de plata de Consecuencias naturales, la novela de Elia Barceló, publicada por Editorial Miraguano en 1994, que «levantó ampollas en el fandom, casi eminentemente masculino, de los años 90» (le robo la frase a Rodolfo Martínez, que asistió en directo a todo el proceso). La mejor forma de celebrar el aniversario de un libro es leyéndolo y, para facilitarnos la tarea, Crononauta lo vuelve a editar, con nueva portada de Mercedes Palacios y epílogo de Teresa López Pellisa.
¿Por qué Consecuencias naturales «levantó ampollas»? Hablo desde la ignorancia, porque por aquel entonces yo no sabía ni lo que era el fandom. Supongo que en aquella época muy pocas mujeres escribían ciencia-ficción, en España menos todavía, y que cualquier incursión femenina en el género sería contemplada, como mínimo, con prevención. Y Consecuencias naturales es una novela escrita por una mujer, con un mensaje claramente feminista y además en clave de humor y de parodia. En esa parte del fandom con prejuicios machistas fuertemente arraigados no es de extrañar que el libro sentara mal, casi como si la autora los estuviese convirtiendo en un chiste (de hecho, eso es lo que hace, y un chiste muy bueno). Afortunadamente, no todo el fandom es igual, y Consecuencias naturales tuvo buena acogida en general y fue finalista en la categoría de mejor novela en los Premios Ignotus del año siguiente.
Sobre el contexto en el que este libro fue publicado y la repercusión que tuvo no hablaré más en esta reseña. Yo oí hablar por primera vez de Consecuencias naturales y de esta edición de Crononauta en el encuentro con Elia Barceló que tuvo lugar durante el pasado Festival Celsius. Si queréis escuchar lo que supuso su primera publicación de labios de la propia autora, tenéis este vídeo que amablemente comparte Elías Combarro en su blog Sense of Wonder. Si queréis un análisis más concienzudo, lo mejor que podéis hacer es leer el documentado epílogo de Teresa López Pellisa. Eso si, no lo hagáis hasta no haber terminado la novela, porque os destriparía el final. De ahí que sea un epílogo, y no un prólogo, como suele ser habitual, supongo.
La historia
Consecuencias naturales nos presenta a la humanidad del siglo XXIII, lo suficientemente avanzada tecnológicamente para emprender viajes espaciales y socialmente evolucionada como para haber institucionalizado el lenguaje inclusivo. Los tripulantes de la nave Victoria van a ser los primeros en establecer contacto con una civilización alienígena, los Xhroll, de aspecto humanoide pero en realidad muy diferentes a los seres humanos.
Entre los tripulantes de la Victoria, el mecánico Nico Andrade, estereotipo intencionado del macho seductor y pagado de sí mismo, resulta casi un anacronismo. Y tiene una idea muy peculiar de lo que debe ser un primer contacto: él solo quiere ser el primer hombre en tener relaciones sexuales con una extraterrestre. Entre sus muchos trofeos de donjuán, este ocuparía, sin duda, un lugar de honor. Lograr su objetivo no le resultará difícil, puesto que la principal preocupación de los Xhroll son sus problemas de reproducción. Se encuentran al borde de la extinción y buscan otras especies compatibles para procrear. Y, naturalmente, la cosa trae consecuencias… bastante inesperadas.
Partiendo de esta premisa, Elia Barceló construye una historia en la que aprovecha el desconocimiento mutuo de las características de ambas especies, sobre todo en cuanto a géneros y papeles reproductores, para poner a sus personajes en situaciones extrañas y desconcertantes, que sirven también para enfrentar al lector con sus propios prejuicios. A lo largo de la novela, las diferencias entre Xhroll y humanos dan lugar a todo tipo de malentendidos y de situaciones que nos resultan hilarantes por la simple inversión de papeles entre los sexos. Si aún hoy día esta reversión nos parece chocante es porque nuestros prejuicios aún permanecen vigentes.
De esta forma, la primera y más evidente lectura de Consecuencias naturales sería algo así como humor feminista. Un humor cargado de fina ironía que resulta refrescante y ácido al mismo tiempo y que, veinticinco años después de ser publicada por primera vez, no ha perdido un ápice de vigencia. Pero no es este el único punto de interés de la novela. Además de ser un alegato feminista, toca otros temas muy del gusto de los aficionados a la ciencia-ficción.
Xhroll
Los xhroll son una especie en apariencia mucho más compacta que los humanos, hasta el punto que la misma palabra, Xhroll, denomina al individuo, a la especie y al planeta, y la frase «es bueno para Xhroll» pone punto final a cualquier conato de discusión. Se trata de una sociedad en principio pacífica y amante de la naturaleza, que conservan en su planeta con mimo y casi reverencia. Sin embargo, el sustrato no es tan idílico como podría parecer. A pesar de tener firmemente arraigada la convicción de trabajar todos por el bien común, comienza a aparecer la amenaza de ciertas disensiones internas. Ese respeto reverencial a la naturaleza parece provenir del escarmiento por errores cometidos en el pasado, con consecuencias desastrosas. El pacifismo puede ser dejado de lado si las circunstancias y la supervivencia de la especie lo requieren, a pesar de sentir un rechazo casi visceral contra la violencia. Y, siempre «por el bien de Xhroll», realizan ciertas prácticas de ética dudosa (al menos desde el punto de vista humano) con sus muertos.
Así que no es oro todo lo que reluce en Xhroll. Elia Barceló crea una sociedad interesante y compleja, a la que sus problemas reproductivos están abocando a la extinción y que está dispuesta a tomar medidas desesperadas para evitarlo, tanto en el interior, con sus propios individuos, como en el exterior, frente a otras especies, como la humana.
El lenguaje
Otro de los temas que me parecen centrales en el libro es cómo el uso del lenguaje nunca es neutral. Pensamos y razonamos con palabras, así que el lenguaje estructura nuestro pensamiento. Consecuencias naturales pone esto en evidencia a varios niveles.
En primer lugar, y quizás sea lo más evidente, está la cuestión del lenguaje inclusivo. Pero la autora va aún más allá, haciendo que los Xhroll no tengan la distinción masculino/femenino en su vocabulario, como no la tienen en sus personas, lo cual es el origen de no pocos malentendidos y dificultades entre humanos y xhroll. Como resultado, queda patente que tal distinción no es en absoluto necesaria, sino que más bien se trata de una construcción mental que, simplemente, nos obliga a realizar una clasificación inútil de personas y objetos como masculinos o femeninos.
Ellos usan el sexo en la lengua de manera constante. Todo debe ser femenino o masculino, incluso los objetos inanimados. Para referirse a personas deben usar las dos posibilidades. Al hablar en primera persona se debe elegir una de ellas. Los humanos saben siempre cuál usar, pero para mí es difícil. ¿Soy yo él o ella?
En segundo lugar, aparecen también las dificultades de comunicación esperables entre dos especies con lenguajes tan diferentes. Hay conceptos humanos que no tienen una palabra en xhroll para nombrarlos (uno de ellos es «violación») y viceversa. Además, los xhroll tienen una palabra única para cada concepto y cada palabra solo debe nombrar una cosa. Son «asquerosamente literales» frente al lenguaje humano, lleno de ironías, dobles sentidos y siempre apoyado en gestos, miradas y actitudes corporales.
Por último, y creo que aquí está el meollo de la novela, en varios momentos, enfrentados a sus problemas de comunicación, los personajes son conscientes de cómo su propio lenguaje condiciona su pensamiento y, por lo tanto, la forma en que perciben la realidad. Esta constatación desempeña un papel fundamental en el desenlace de la historia, que es aleccionador y optimista al mismo tiempo.
En definitiva, Consecuencias naturales es una novela de ciencia ficción feminista en clave de humor, cuya crítica no ha perdido vigencia a pesar de los años transcurridos, pero no es solo eso. Más allá de su evidente intención provocadora, es una buena novela de ciencia ficción, con ciertos tintes ecologistas y una potente reflexión sobre el poder del lenguaje.
Valoración
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9/10
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